Blogia
dosdedos

Si yo pudiera

Estoy leyendo (ooootra vez) 'Las Ciudades Invisibles' de Italo Calvino, libro que me recomendara hace tantos años el profe, cuyo autor se ha enriquecido gracias a que Vicky, la Santu y yo lo hemos comprado en numerosas oportunidades (para regalar, para compartir, yo misma dos veces porque 'lo perdí').

Se trata de uno de esos libro que han dejado huella y al que siempre me encanta volver (tengo una compulsión por releer libros cada cierto número de meses, me gusta volver a lugares conocidos y siempre –consecuencia de cierta mala memoria– me resultan nuevos cada vez). Pero éste en especial me mató cuando llegué al final, porque cierra con algo que no recordaba pero siempre he sabido (si me entienden). Acá va:

' El infierno de los vivos no es algo por venir; hay uno, el que ya existe aquí, el infierno que habitamos todos los días, que formamos estando juntos. Hay dos maneras de no sufrirlo. La primera es fácil para muchos: aceptar el infierno y volverse parte de él hasta el punto de dejar de verlo. La segunda es arriesgada y exige atención y aprendizaje continuos: buscar y saber reconocer quién y qué, en medio del infierno, no es infierno, y hacer que dure, y dejarle espacio.’

Este final, que propone dos bandos (todos saben a cual suscriben ¿o me equivoco?), es el tipo de final que hacen que cualquier libro que lo incluya, sin importar las quichicientas páginas anteriores, valga la pena.

12 comentarios

juglar103 -

Uy perdón, me refería a esto:
http://www.infoaragon.net/servicios/blogs/juglar103/index.php?idarticulo=200404091

dosdedos -

Querida Rosario:
Vos si que sos fueguito sin ser infierno... y haciendo honor al siguiente post, me juego a que habrás sido medio Mafalda...

Gracias por seguir comentando.

Un beso y tres abrazos

Rosario -

Querida Dani:
Toy media lerda para comentar, pero quería contarte que he leído este libro y hasta me anime a hacer algo de teatro con sus textos...también me acuerdo tu recomendación de leerlo en una de tus clases de tipografía...
Con respecto al infierno de los vivos, y a seguir buscando...no te gastes...simplemente hay que levantarse y ser "uno mismo", "ser lo que uno es", sin tener la cabeza atenta (más vale el corazón para estos casos) o andar buscando por ahí, porque "Dios nos cría y el viento nos amontona"...
Y así solitos, casi sin darnos cuenta, nos vamos encontrando con otros "fueguitos" los de Galeano (por ej)... esos que brillan "tanto", que hacen que el infierno de todos los días sea soportable..depende el bando..( suscripción que hay que renovar a diario)
Besos

Gance -

Al leer el pasaje, de este escritor que nunca lei, mas de uno o dos cuentos, me llevo unos instantes a un pequeño viaje a las inmencidades del infierno. vi almas vagando, sufriendo, gritos tan estridentes que imposible taparce los oidos, cuando subi nuevamente me di cuenta que es muy bueno darce una vueltita cada tanto. Al igual que el dante, despues de ver donde no queremos estar, cambiamos algunas conductas, (al menos por un tiempito). Saludos.

juglar103 -

Ese libro nunca me lo he llegado a leer, pero le tengo mucho cariño en la distancia. Hace unos años oía yo un programa en Radio3 " El ojo de Ya-Ve", que leían relatos varios. De los que más me impresionó fueron algunos retazos de las Ciudades Invisibles. Fue fantástico. Fue definir la imaginación. "Si queréis creerme, bien. Ahora diré cómo es Octavia, ciudad telaraña..."

dosdedos -

¡Vi! Estaba por decir que ¡qué bárbaro! pero la verdad es que, como decís, en nosotras este tipo de eventos tiene poco y nada de sorpresivo.

No sabés cuánto me alegra que vengas... ya no me queda paciencia.

Vicky -

Dan, debe haber sido ayer a la misma hora que escribiste esto, que le le hice comprar a Dominique el libro... Estabamos tomando un cafe después de comer con Ale y él en una librería cuando de refilón vi el lomo de Ciudades Invisibles. Se lo recomendé con una publicidad bárbara y lo llevó... Una vez más estábamos a la misma hora y a miles de km con la misma cosa en la cabeza... Te hace recordar a viejos acontecimientos?? Sin palabras... Un besote, te extrañaba online.

dosdedos -

Queridos amigos: esa es la cuestión... que no siempre sé donde, quién, cómo y cuándo empieza el infierno... ¿quizás lo único que se pueda hacer es seguir buscando?

Los extraño...

Mi estimado peorsordo: no he leido mucho más de Italo Calvino... pero evidentemente, esté será el inicio de venturosos días de lectura, espero.

bloguito -

DD... siempre vos y tu magia acercándome un poco de claridad.
Hace tiempo que trato de reconciliarme con Calvino, y a pesar de tenerlo como material "imprescindible" en mis clases de CV, no logro leerlo como antes... sin "fantasmas" entre él y yo.
Cosas del infierno...
Hoy, vos y tu post me hicieron sentir a Calvino otra vez mas cerca.
Gracias!

Arturo -

DosDedos.. me has hecho llorar por dentro.
Que pedazo de post!
Y si... me has hecho acordar que yo te arrimé el bochín con ese libro de Calvino. Sin pensar que años después, miles de kilómetros mediante, me lo traerías como un recuerdo viviente.
Por suerte, vos y yo sabemos quién, -en medio del infierno- no es infierno. Y nos reconocemos al mirarnos.
Te beso, beso, beso.

elpeorsordo -

Italo Calvino es alguien que siempre me ha gustado, como autor y como persona. Cuando leo sus comentarios, sus fábulas de nobles rampantes, demediados o imaginarios y las deliciosas desventuras de Marcovaldo siento una emoción y una simpatía invencible.